sábado, 9 de marzo de 2013

Secretamente imprescindible

  Siempre me han parecido más interesantes los detalles marginales en los cuadros, el pequeño rasgo de ambiente que parece pasar desapercibido cuando vemos una película, el adjetivo oportuno en un largo texto, el matiz de un silencio en la melodía...  La evidencia es plana. 
  Corrigiendo exámenes con las estrofas de Jorge Manrique piensa una: ¡qué habría sido de él sin la pausa versal de los tetrasílabos, tan perfectamente colocada que obliga a cortar el aliento durante el discurso de un modo casi imperceptible!
  El valor de una obra de arte radica fundamentalmente en lo que es secretamente imprescindible.
     

Van Gogh: "Retrato del Dr. Gachet"





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